Señor Jesucristo, desde el principio siempre nos has amado y nos has mostra- do la profundidad de tu amor al morir por nosotros en la cruz haciendo tuyos nuestros sufrimientos y heridas. En este momento queremos poner a los pies de tu cruz todos los obstáculos que nos separan de tu amor. Remueve la piedra que nos mantiene prisioneros. Despiértanos a la mañana de tu resurrección. Que allí podamos encontrarnos con los hermanos y hermanas de los que estamos separados. Amén.
Blog oficial de la Parroquia de Santa María de Illescas (Toledo)